El burro
de Godofredo Daireaux
El burro había nacido bueno, alegre, sumiso, lleno de buena voluntad. Era feo, es cierto, pero se reía con tan buena gana, que a pesar de su voz horrenda, su rebuzno parecía canto. Se burlaban de él y de su facha: él sacudía las orejas y se reía, bonachón.
Pero, porque era bueno, empezaron a abusar de él. Era fuerte, por ser tan chico, lo cargaron demasiado; era sobrio, casi no le dieron de comer; era resistente, le hicieron trabajar más de lo que era posible. Y cuando ya no daba más, lo empezaron a maltratar.
Se le avinagró el genio; sus orejas no se movían ya risueñas, sino que las echaba para atrás, enojado, enseñando los dientes y aprontaba las patas.
Y el amo, desconfiando, a pesar de tener en la mano el palo amenazador, decía: «¡Qué malo es el burro!».
Fácil ver la paja en el ojo ajeno y difícil la viga en el propio.
ResponderEliminarCurioso, pero estoy "al rescate" de un burrillo que vive en cercanías, de momento he conseguido que le tengan suelto y ahora a ver si consigo que no esté completamente solo todos los días.
En fin!
Buen verano, Borraeso y un beso.
Fácil ver la paja en el ojo ajeno y difícil la viga en el propio.
ResponderEliminarCurioso, pero estoy "al rescate" de un burrillo que vive en cercanías, de momento he conseguido que le tengan suelto y ahora a ver si consigo que no esté completamente solo todos los días.
En fin!
Buen verano, Borraeso y un beso.
He buscado un mail donde dirigirme, pero o no lo hay o no he sabido verlo. Así que te lo explico aquí.
ResponderEliminarMe he trasladado a un pueblo aún más pequeño del que vivía antes... se podría decir que ahora mismo resido en algo muy parecido al campo...
Y justo delante de casa, desde que llegué, se oían los rebuznos de un burrillo, tristes y a menudo, así que me interesé en el tema y vi que le tenían atado todo el día :(. Pregunté y protesté, y le hemos ayudado al dueño a hacer una cerca (vive solo y es muy mayor) para que no le pise el huerto... y ahora ya no se le oye tanto, pero sigue siempre solo, así que ahora estamos convenciendo al hombre, para que en vez de traerle forraje una vez a la semana, le traiga menos... pero más a menudo...
Pero aún cuesta hacer entender a la gente que cualquier ser vivo necesita cariño y compañía... pero creo que vamos por el buen camino, porque el animal es simpático y agradecido. Y eso es todo, niña.
Un beso.
He buscado un mail donde dirigirme, pero o no lo hay o no he sabido verlo. Así que te lo explico aquí.
ResponderEliminarMe he trasladado a un pueblo aún más pequeño del que vivía antes... se podría decir que ahora mismo resido en algo muy parecido al campo...
Y justo delante de casa, desde que llegué, se oían los rebuznos de un burrillo, tristes y a menudo, así que me interesé en el tema y vi que le tenían atado todo el día :(. Pregunté y protesté, y le hemos ayudado al dueño a hacer una cerca (vive solo y es muy mayor) para que no le pise el huerto... y ahora ya no se le oye tanto, pero sigue siempre solo, así que ahora estamos convenciendo al hombre, para que en vez de traerle forraje una vez a la semana, le traiga menos... pero más a menudo...
Pero aún cuesta hacer entender a la gente que cualquier ser vivo necesita cariño y compañía... pero creo que vamos por el buen camino, porque el animal es simpático y agradecido. Y eso es todo, niña.
Un beso.
Recuerdo mi embelese con la borriquilla de mi infancia... a la que cubríamos de caricias y reclamábamos atención cada vez que fijaba sus ojos en mi abuelo, al que tanto adoraba...
ResponderEliminarSi al menos ahora ha ganado un poquito de espacio y movimiento con la nueva cerca, hurra por vuestras buenas intenciones.
Es una pena el problema de soledades que crea nuestro loco mundo.
Espero que nos cuentes otro día del burro, del amo, de todos...
En fin, un beso!!!