(...) Alicia y la Oruga se estuvieron contemplando en silencio durante algún tiempo. Al fin la Oruga se quitó la boquilla del marguile de la boca y le habló con voz lánguida y adormilada.
"¿Quién eres TU?", preguntó la Oruga.
No era ésta precisamente la manera más alentadora de iniciar la conversación. Alicia replicó, algo intimidada: "Pues verá usted, señor..., yo..., yo no estoy muy segura de quien soy, ahora, en este momento; pero al menos sí sé quién era cuando me levanté esta mañana; lo que me parece es que he sufrido varios cambios desde entonces".
"¿Qué es lo que quieres decir?", dijo la Oruga con severidad. "¡Explícate!"
"Mucho me temo, señor, que no sepa explicarme a mí misma", respondió Alicia, "pues no soy la que era, ¿ve usted?"
"¡No veo nada!", dijo la Oruga.
"Temo no poder decírselo con mayor claridad", insistió Alicia muy cortésmente, "pues, para empezar, ni yo misma lo comprendo; y además cambiar tantas veces de tamaño en un solo día resulta muy desconcertante".
"No lo es", replicó la Oruga.
"Bueno, quizá a usted aún no se lo parezca así", dijo Alicia; "pero cuando se haya transformado en una crisálida -y eso ha de pasarle algún día, ¿sabe?-, y, después, cuando se convierta en una mariposa, ¿no cree que le parecerá todo eso un poco extraño?"
"¡En absoluto!", declaró la Oruga.
"Bueno, quizás tenga usted sentimientos distintos a los míos", dijo Alicia; "pero lo que sí sé es que yo, en su lugar, me sentiría ciertamente muy rara!"
"¡Ah! ¡Tú!, dijo la Oruga con desdén. "¿Y quién eres tú?"
Con lo cual acababan volviendo por donde habían empezado. Alicia comenzaba a sentirse irritada por estas observaciones tan tajantes y tan secas de la Oruga, de forma que poniéndose muy derecha le dijo gravemente: "Me parece que es usted quien debe decirme antes quién es".
"¿Por qué?", replicó la Oruga. (...)
Alicia en el País de las Maravillas
Lewis Carroll (Charles Lutwidge Dodgson)
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“Alicia sortilegio de babia
ResponderEliminaren el fondo del espejo.
Alicia ni supone ni piensa,
con la luna por cerebro.
Alicia en su pensamiento
tirando del hilo de su enredo.
Alicia en el laberinto
sin minotauro me llama: ¡Teseo!”
Letra de canción de mi admirado Enrique Bunbury.
La identidad, difícil tema. Supongo que nos comportamos, actuamos de diferente manera según situaciones personales, momentos vitales.
El cerebro es difícil de disfrazar, tanto que en determinados momentos te puede jugar malas pasadas, he incluso, te puede hacer ser personas diferentes en el mismo cuerpo.
De todas maneras, hay que tratar de mantener el equilibrio personal en la medida de lo posible.
Un beso.
Hay quien tiene el don de saber ser diferente según le convenga, y hay que simplemente es como es sin más y eso a mucha gente no le gusta y lo tacha de simpleza , pero lo importante es saber uno mismo quien es en realidad .
ResponderEliminarBesossss.
P.D. Hoy hay sol pero un airecillo bastante frío ...
Leí que todas las alucinaciones de Alicia no son más que un reflejo de las suyas, producidas por distintos tipos de droga. Además también leí, que era un pederasta... no sé...
ResponderEliminarEn cuanto a quién soy, intento descubrirlo.
Besos
UN POCO FUMETA SI QUE ERA EL LEWIS ESTE, A MI NO ME GUSTA EL LIBRO "ALICIA EN EL PAIS DE LAS MARAVILLAS"
ResponderEliminarMI AMIGA WIKY MA HA CONTADO ESTO:
Consumo de estupefacientes [editar]Ha habido multitud de especulaciones sobre la posibilidad de que Dodgson hiciera uso de drogas psicoactivas, aunque no existe prueba alguna que respalde esta teoría. No obstante, la mayoría de los historiadores consideran probable que el autor utilizase de vez en cuando láudano, un analgésico de consumo bastante común en la época, y que le ayudaría con el dolor de su artritis. Hay que señalar que esta sustancia procede del opio, y puede producir efectos psicotrópicos si es utilizado en dosis lo suficientemente grandes. Pese a ello, no existe evidencia alguna que pueda llevar a pensar que Dodgson abusara de los narcóticos, ni de que éstos tuvieran influencia alguna en su trabajo. Por otro lado, algunos han creído ver en las alucinaciones que sufre su personaje, Alicia, una referencia a las sustancias psicodélicas. Por ejemplo, en el caso de la Amanita Muscaria que produce macrostesia y microstesia, vemos una analogía en las variaciones de tamaño que sufre Alicia al ingerir trozos de seta.
102 BESOS YA SABES...
Ay...que no quisiera encontrarme con la oruga y titubear. ver tan claro su identidad y no la mía.
ResponderEliminarGrocho me ha clavado una espina.
Ahora caigo en la cuenta que pasan a mi lado muchas Amanitas muscaria disfrazadas...y aunque no las consuma, ellas quieren narcotizarme con sus efectos.
Besitos
Hay mañanas que no me reconozco, cuando me levanto y me miro digo: dios mio.. esta no puedo ser yo jajajaj Besitos varios
ResponderEliminar...Alicia es siempre tan breve
ResponderEliminarque ya ha terminado.
Alicia dice que te quiere
cuando ya te ha abandonado.
Alicia expulsada...
al/del? país de las maravillas.
para Alicia hoy...
es siembre todavía.
Zoe, no conocía la canción... a Bunbury lo conocía como héroe del silencio... pero de eso hace... taitantos?
Un beso.
Yo creo que Alicia en. . . es una obra maestra, y si la leés a diferentes edades, vas descubriendo nuevas cosas.
ResponderEliminarGracias por el comentario, siempre tan cordial y presente.
BESOS
carlota, yo voto por ser cada uno, uno, creciendo, reconociéndose, con sorpresas pero sin subterfugios... Luego está el confundirse con el medio o adoptar diferentes colores dependiendo de la situación, pero eso es ya cuestión de etología... y cada uno la lleva a su modo.
ResponderEliminarUn beso.
P.D.: Esta tarde salió el sol entre nubes y gotas de agua...
Stanley, siempre me ha hecho gracia este cruce de comentarios... que casi te piso sin darme cuenta, pues andábamos comentando a la vez...
ResponderEliminarDe acuerdo contigo, Alicia... un descubrimiento diferente a una edad diferente... Me encanta releerla cada cierto tiempo y, por qué no, ver la peli de Disney que, aunque le da otro aroma también es sabroso...
Un beso.
Merce, espero que no fuese un pederasta... es más me encantaría que no existiese ni esa aberración ni el concepto... pero no está en mi mano.
ResponderEliminarCon respecto a las drogas, qui lo sa? Amanita, laúdano, quizá le daba al alcohol? Pero las drogas no tienen pluma, ni tinta...
Un beso.
No es fácil encontrar a alguien que esté seguro de quién es en este mundo cambiante.
ResponderEliminarCon lo de releer y tal, a mí me pasa con El Principito. Ya perdí la cuenta de las veces que lo leí.
Un beso.
Groucho, también se dice que le diagnosticaron epilepsia... La amiga wiki siempre tan eficiente...
ResponderEliminarA mí sí me gusta Alicia... y me fascina su magia y su imaginación (con o sin setas).
Un beso.
mara, mejor no titubear ante las orugas... pero Alicia es una niña en un mundo cambiante... nosotras ya somos jovencitas.
ResponderEliminarEspinitas fuera... tú ya tienes buenas musas.
Un beso.
Eria, pero eso es el espejo que te despeina y te pone ojeras... luego agua fría y un milagrito y se acabó el problema.
ResponderEliminarUn beso.
R.Laó, seguro nunca pero sí en su mayoría... o no?
ResponderEliminarPlatero y yo podría ser otro.
Un beso.
A veces tengo miedo de saber quién soy. Por eso prefiero ignorarlo. Otras, me pica la curiosidad... Y ahí, en esa prolongada incertidumbre estamos...
ResponderEliminarBuena y profunda entrada, Borraeso.
Besos
Yo soy yo y mis circunstancias, en constante evolución...
ResponderEliminar¿Y tú, quién eres?
Me encantó tu post, y me llevó al mundo de las Maravillas por un ratito. Estar en una burbujita así siempre es de agradecer.
Una sonrisa enorme.
Luis, borraremos el miedo que nosotros debemos ser nuestros primeros aliados... Curiosidad, por supuesto, incertidumbre siempre...
ResponderEliminarUn beso.
Darthpitufina, yo soy yo y mis circunstancias, como tú,...
Besos y sugus...